Saludo nazi en los estadios... (?)
Me produce no poca dosis de confusión e inquietud lo que he venido viendo en fotos de aficionados al fútbol en los estadios de Colombia... tribunas completas con la mano derecha levantada mientras cantan el himno o algún otro cántico a sus equipos. Lo que más preocupa es que nadie parece darse cuenta de que se trata del saludo obligatorio de los nazis antes y durante la Segunda Guerra Mundial. He visto fotos de hinchas del Nacional y de Millonarios en más o menos la misma posición y actitud en los dos últimos meses y no he leído ni una sola columna o comentario sobre el tema.
El saludo nazi en Alemania y luego en otros países invadidos por Alemania, como Austria, se intentó hacer ver como una especie de herencia de los romanos. Por lo que he leído, no lo es. Surgió como un invento que prontamente se asoció con cierto militarismo y cierta ansiedad por ver vivir imperios y el totalitarismo (de ahí quizá la asociación con Roma), aunque Roma no fue siempre un imperio. Parece que en Italia fue donde primero lo usaron y luego en otras formas de cultura popular, como el cine, se empezó a ver el "ave césar" para ambientar las películas sobre el imperio romano, siempre acompañado con un gesto de la mano derecha levantada y doblada en el codo de parte del líder. Los nazis luego lo adoptaron como su forma de saludo, primero optativa y luego obligatoria, usando la mano extendida y acompañado de "heil, Hitler!" "sieg heil!" o "heil, mein Führer!" al que Hitler podía responder como se supone respondían los emperadores romanos. Es impresionante ver las muestras de unidad de los alemanes en las manifestaciones nazis, todos al unísono levantando la mano en esa forma, coreando con ella el saludo a Hitler.
Hoy, luego de haber padecido los estragos de la guerra, el saludo está prohibido en Alemania, Austria, Suiza y otros países europeos. Se entiende que es una forma de expresión de odio y discriminación y no hace parte de "la libre expresión". Está simplemente prohibido, como lo están las banderas con esvásticas pintadas y otras formas de glorificar las ideas de discriminación y violencia.
Es curioso que en Inglaterra los famosos hooligans se han permeado a su vez de una ideología de extrema derecha bastante sospechosa. Las barras de los equipos ingleses, especialmente de equipos que representan zonas de alta población blanca y de bajos ingresos, se endurecieron hace unas décadas y se organizaron más en pandillas violentas que en barras para vitorear a sus equipos, que con frecuencia perdían. Era en el mejor interés de estas barras que perdieran, así podían justificar su frustración. Pero pronto algunas empezaron a ser además cooptadas y permeadas por una ideología neonazi. Algo que para lo sociedad no pasó desapercibido y que el gobierno inglés notó y empezó a frenarlo y combatirlo con bastante efectividad hoy día. Pero esas manifestaciones de masas, todos cantando vítores al vencedor o al aspirante, siempre produce esa ansiedad de una masa que no está pensando, que siente que tiene un único objetivo y que mientras estén unidos y juntos y actúen así serán vencedores y que entre ellos se justifica cualquier desmán. Ya Elias Canetti explicó con mejor gloria lo que la masa significa. Esto es solo un ejemplo más.
Volviendo hacia nuestros hinchas de Nacional o Millonarios, es increíble que no sea denunciada esta actitud. Pero nuestra ignorancia de la historia no da para más, infortunadamente. Y nuestro velado pero siempre presente baile de seducción con el militarismo y ciertas ideas totalitarias, tampoco. Sin embargo, no es menos imperdonable. La ignorancia nos sale siempre costosa y me preocupa ver tribunas llenas que, si les quitaran el audio y las presentaran en blanco y negro (para no ver el color del equipo y quedar más a tono), parecerían manifestaciones nazis en favor de Hitler.
Hace un tiempo en un pequeño almacén vi en la vitrina un dije para la venta, un esvástica. Ya no soportando más le pregunté a la empleada y le dije que debería retirarlo, que esas cosas no se promocionaban y eran profundamente ofensivas para muchos. Se sorprendió pues no sabía qué en realidad representaba el signo. Aunque luego me dijo que era la segunda persona que se lo decía y que entonces lo iba a guardar. No creo que se fuera a casa a leer el porqué la gente le reclamaba con eso y quizá ese es el problema; los hinchas, si les dijeran que esa no es la forma de cantarle a un equipo, no se pondrán a leer sobre eso. Lo que más me preocupa es que en ese estadio, entre quienes hacen el saludo nazi, pueden estar el tendero, el señor del taxi, el que mañana será policía, el que me atiende en un banco o la muchacha que me vende en alguna parte. No sé cómo explicarlo pero al final es a esa ignorancia a la que más le temo.
El saludo nazi en Alemania y luego en otros países invadidos por Alemania, como Austria, se intentó hacer ver como una especie de herencia de los romanos. Por lo que he leído, no lo es. Surgió como un invento que prontamente se asoció con cierto militarismo y cierta ansiedad por ver vivir imperios y el totalitarismo (de ahí quizá la asociación con Roma), aunque Roma no fue siempre un imperio. Parece que en Italia fue donde primero lo usaron y luego en otras formas de cultura popular, como el cine, se empezó a ver el "ave césar" para ambientar las películas sobre el imperio romano, siempre acompañado con un gesto de la mano derecha levantada y doblada en el codo de parte del líder. Los nazis luego lo adoptaron como su forma de saludo, primero optativa y luego obligatoria, usando la mano extendida y acompañado de "heil, Hitler!" "sieg heil!" o "heil, mein Führer!" al que Hitler podía responder como se supone respondían los emperadores romanos. Es impresionante ver las muestras de unidad de los alemanes en las manifestaciones nazis, todos al unísono levantando la mano en esa forma, coreando con ella el saludo a Hitler.
Hoy, luego de haber padecido los estragos de la guerra, el saludo está prohibido en Alemania, Austria, Suiza y otros países europeos. Se entiende que es una forma de expresión de odio y discriminación y no hace parte de "la libre expresión". Está simplemente prohibido, como lo están las banderas con esvásticas pintadas y otras formas de glorificar las ideas de discriminación y violencia.
Es curioso que en Inglaterra los famosos hooligans se han permeado a su vez de una ideología de extrema derecha bastante sospechosa. Las barras de los equipos ingleses, especialmente de equipos que representan zonas de alta población blanca y de bajos ingresos, se endurecieron hace unas décadas y se organizaron más en pandillas violentas que en barras para vitorear a sus equipos, que con frecuencia perdían. Era en el mejor interés de estas barras que perdieran, así podían justificar su frustración. Pero pronto algunas empezaron a ser además cooptadas y permeadas por una ideología neonazi. Algo que para lo sociedad no pasó desapercibido y que el gobierno inglés notó y empezó a frenarlo y combatirlo con bastante efectividad hoy día. Pero esas manifestaciones de masas, todos cantando vítores al vencedor o al aspirante, siempre produce esa ansiedad de una masa que no está pensando, que siente que tiene un único objetivo y que mientras estén unidos y juntos y actúen así serán vencedores y que entre ellos se justifica cualquier desmán. Ya Elias Canetti explicó con mejor gloria lo que la masa significa. Esto es solo un ejemplo más.
Volviendo hacia nuestros hinchas de Nacional o Millonarios, es increíble que no sea denunciada esta actitud. Pero nuestra ignorancia de la historia no da para más, infortunadamente. Y nuestro velado pero siempre presente baile de seducción con el militarismo y ciertas ideas totalitarias, tampoco. Sin embargo, no es menos imperdonable. La ignorancia nos sale siempre costosa y me preocupa ver tribunas llenas que, si les quitaran el audio y las presentaran en blanco y negro (para no ver el color del equipo y quedar más a tono), parecerían manifestaciones nazis en favor de Hitler.
Hace un tiempo en un pequeño almacén vi en la vitrina un dije para la venta, un esvástica. Ya no soportando más le pregunté a la empleada y le dije que debería retirarlo, que esas cosas no se promocionaban y eran profundamente ofensivas para muchos. Se sorprendió pues no sabía qué en realidad representaba el signo. Aunque luego me dijo que era la segunda persona que se lo decía y que entonces lo iba a guardar. No creo que se fuera a casa a leer el porqué la gente le reclamaba con eso y quizá ese es el problema; los hinchas, si les dijeran que esa no es la forma de cantarle a un equipo, no se pondrán a leer sobre eso. Lo que más me preocupa es que en ese estadio, entre quienes hacen el saludo nazi, pueden estar el tendero, el señor del taxi, el que mañana será policía, el que me atiende en un banco o la muchacha que me vende en alguna parte. No sé cómo explicarlo pero al final es a esa ignorancia a la que más le temo.
Comments