Medellín en las pruebas Pisa (Antioquia la Maleducada II)
Volver a los temas tradicionales de mi blog ha sido como difícil... pero el tema de las pruebas Pisa es demasiado tentador para no apartarme del tema Space por al menos un rato. Con el correr de los días, de que ahora hay un espacio que está lejos de ser el ideal pero es una buena solución como vivienda y hogar temporal, la cosa pinta menos dramática aunque no menos grave o difícil. Solo menos urgente, ahora uno puede concentrarse en lo importante.
Ya se ha ventilado en todos los medios que a Colombia le fue mal en las pruebas Pisa 2012. Nos ha ido mal siempre. No importa en número de países, digamos que sean N para cierto año. Colombia siempre está en el puesto N menos dos. Y también cada vez que salen los resultados la culpa le cae a los maestros de una forma o de la otra, por la falta de conocimiento o la falta de algo. O en el Estado por que paga mal, selecciona mal, no evalúa, no tiene planes, no hay visión, etc.
Esta nota entonces no es para caerle a los maestros sino para decir dos cosas, una que no basta gastar mucho dinero (o pretender gastarlo) en educación y que las estrategias que se han diseñado no están funcionando en Medellín y no van a funcionar en Antioquia. En octubre de 2010 le escribí a Sergio Fajardo y a Rafael Aubad:
Entre 2006 y 2007 tuve la oportunidad de trabajar por un año en la Secretaría de Educación de Medellín (en préstamos de la Universidad de Antioquia), proponiendo y tratando de liderar estrategias para el mejoramiento de la enseñanza de las matemáticas en la ciudad. Debo reconocer que, viendo los resultados, lo que hice, o hicimos con otras personas, no ha funcionado. Sin embargo, esas fórmulas se siguen repitiendo mecánicamente y costando mucho dinero, pero la realidad es terca, siguen sin funcionar. Y lo peor, se traspasó al Departamento de Antioquia sin fórmula de evaluación y ahora va a costar y, muy probablemente, a no funcionar en todo el Departamento pues no solo son las mismas ideas y proyectos, copiados sin evaluación alguna, sino que los desarrollan las mismas personas.
Veámos los resultados según PISA para tres ciudades de Colombia:
Fuente: Mineducación.
En otras palabras, lo que tiene que ver con Matemáticas y Lectura, Medellín era segundo y sigue siendo segundo; aunque mira por encima del hombro a todo el país porque es la más educada. Ahí hay una pretención que no está soportada por los datos.
Y uno puede suponer que inicialmente las ideas no son malas: capacitar profesores, crear colegios con buena infraestructura, buscar mejorar la gestión de las Instituciones Educativas, divulgar el estudio, las matemáticas y el conocimiento. Sin embargo, lo que se hace no funciona. Los profesores no mejoran mucho, los colegios que se hicieron tienen múltiples problemas, las bibliotecas también, los esquemas de comunicación no se renuevan y se gastan. Y no es que personalmente yo pueda decir que sé qué hacer, pero lo que es claro es que seguir repitiendo las prescripciones que claramente no han funcionado no es buena idea. Y habría que empezar por investigar y estudiar más y evaluar lo hecho y reconocer sus resultados para ir buscando qué cosas sí podrían funcionar. Las ideas a veces son bellas, las ejecuciones pueden ser lo que empobrece sus resultados. Quizá las ideas no es lo que no sirve, quizá son los enfoques y la forma de ejecutar. No sabemos y los dirigentes que tenemos no quieren saber: parte de su propuesta es seguir insistiendo en que sí sirven (algo contraevidente) y seguirlas repitiendo casi a ciegas.
El silencio o casi silencio de las facultades de educación en Medellín es también bastante diciente. ¿No habría una gran responsabilidad de parte de éstas? Los contratos que han celebrado las Secretarías de Educación de Antioquia y Medellín (y algunos municipios) con estas facultades suman muchos miles de millones de pesos por años, los resultados están por verse ¿no hay ahí un problema de conflicto de intereses pues estas facultades y universidades se benefician de los contratos oficiales y luego guardan un silencio triste cuando los malos resultados salen a la luz pública? ¿No sería como para salir a revisar qué fue lo que se hizo en esos contratos, que luego de ejecutados muestran resultados tan pobres? No digo devolver el dinero, pero sí revisar para no seguir repitiendo, mejorar internamente para que se gradúen más y mejores docentes de educación básica y media y proponer programas y proyectos más efectivos.
Lo mismo va para el Ministerio de Educación. En la página del Ministerio de Educación Nacional figura como Directora de Calidad de Educación Preescolar, Básica y Media la Sra. Mónica Figueroa. Su hoja de vida está aquí. Sus calificaciones no incluyen ser docente o que haya hecho investigación en el área, solo ser funcionaria eterna de una entidad u otra. Por poner un último ejemplo, hay fenómenos interesantes en la historia del país como los INEM que cuando se crearon dieron buenos resultados académicos. Solución: acabarlos y desdibujar sus definiciones y estructura única. Este tipo de fenómenos son la norma. Ahora, en estos días, llega al ICFES un Señor con doctorado en telecomunicaciones... y sale una persona con doctorado en educación.
En síntesis, actuamos sin evaluar lo hecho y no sabemos qué funciona y qué no. Los resultados de PISA son malos para Colombia, pero son más malos para Medellín que lleva años construyendo y contratando cosas sin lograr mucho. Es hora de que paremos de gastar y empecemos a invertir, pero para invertir hay que saber qué sirve y qué no. Y no sabemos, es hora de evaluar y repensar. Es hora de cambiar gente, ideas, formas, métodos, de todo. Es hora de una crisis, las cosas no pueden seguir como están en educación.
Ya se ha ventilado en todos los medios que a Colombia le fue mal en las pruebas Pisa 2012. Nos ha ido mal siempre. No importa en número de países, digamos que sean N para cierto año. Colombia siempre está en el puesto N menos dos. Y también cada vez que salen los resultados la culpa le cae a los maestros de una forma o de la otra, por la falta de conocimiento o la falta de algo. O en el Estado por que paga mal, selecciona mal, no evalúa, no tiene planes, no hay visión, etc.
Esta nota entonces no es para caerle a los maestros sino para decir dos cosas, una que no basta gastar mucho dinero (o pretender gastarlo) en educación y que las estrategias que se han diseñado no están funcionando en Medellín y no van a funcionar en Antioquia. En octubre de 2010 le escribí a Sergio Fajardo y a Rafael Aubad:
No creo que las cosas hayan cambiado realmente. El Parque Explora costó, de dinero de los contribuyentes porque no hubo dinero privado, la bobada de 70.000 millones de pesos, sin contar lo que costó renovar el Planetario (que lo absorvió Explora luego de una lamentable gestión científica del ITM) y lo que ha costado renovar las muestras y el funcionamiento. Es decir, la cuenta es mucho más alta, digamos 85.000 millones de pesos y ya varios años de funcionamiento (para que no pueda decirse que necesita tiempo para desarrollar sus estrategias) pero los resultados de PISA en ciencias son malos.
Apreciados Sergio y Rafel,
Hace unos días tuve que ir al Parque Explora y la soledad me sorprendió tanto que averigüé un poco más y me parece que la cosa no va bien. Por muchos lados me llega información que corrobora esto... muchas historias acompañan esta percepción pero que no quiero transmitir pues no puedo ser eco de rumores, aunque de todas formas lo dejan a uno preocupado. Mi temor está en dos ejemplos: Planetario y Museo EPM. Dos proyectos que se volvieron irrelevantes pues nos acostumbramos a sus edificios pero no a su papel y a su actividad. En el museo de EPM a uno le leen el aura... aunque parezca increíble.
El día que fui hubiera preferido ver eso lleno de muchachos así fuera gratis. Un Parque lleno a 100 pesos la entrada es mejor que uno vacío a 5000, digo yo. En fin, les quería manifestar mi preocupación a Uds. que son las únicas personas que conozco que eventualmente podrían averiguar bien y hacer algo.
Entre 2006 y 2007 tuve la oportunidad de trabajar por un año en la Secretaría de Educación de Medellín (en préstamos de la Universidad de Antioquia), proponiendo y tratando de liderar estrategias para el mejoramiento de la enseñanza de las matemáticas en la ciudad. Debo reconocer que, viendo los resultados, lo que hice, o hicimos con otras personas, no ha funcionado. Sin embargo, esas fórmulas se siguen repitiendo mecánicamente y costando mucho dinero, pero la realidad es terca, siguen sin funcionar. Y lo peor, se traspasó al Departamento de Antioquia sin fórmula de evaluación y ahora va a costar y, muy probablemente, a no funcionar en todo el Departamento pues no solo son las mismas ideas y proyectos, copiados sin evaluación alguna, sino que los desarrollan las mismas personas.
Veámos los resultados según PISA para tres ciudades de Colombia:
2009
|
Matemáticas
|
Lectura
|
Medellín
|
389
|
429
|
Manizales
|
389
|
427
|
Bogotá
|
410
|
446
|
Promedio Nacional
|
381
|
413
|
Fuente: El TIEMPO.
2012
|
Matemáticas
|
Lectura
|
Medellín
|
393
|
423
|
Manizales
|
404
|
431
|
Bogotá
|
393
|
422
|
Promedio Nacional
|
376
|
403
|
Fuente: Mineducación.
En otras palabras, lo que tiene que ver con Matemáticas y Lectura, Medellín era segundo y sigue siendo segundo; aunque mira por encima del hombro a todo el país porque es la más educada. Ahí hay una pretención que no está soportada por los datos.
Y uno puede suponer que inicialmente las ideas no son malas: capacitar profesores, crear colegios con buena infraestructura, buscar mejorar la gestión de las Instituciones Educativas, divulgar el estudio, las matemáticas y el conocimiento. Sin embargo, lo que se hace no funciona. Los profesores no mejoran mucho, los colegios que se hicieron tienen múltiples problemas, las bibliotecas también, los esquemas de comunicación no se renuevan y se gastan. Y no es que personalmente yo pueda decir que sé qué hacer, pero lo que es claro es que seguir repitiendo las prescripciones que claramente no han funcionado no es buena idea. Y habría que empezar por investigar y estudiar más y evaluar lo hecho y reconocer sus resultados para ir buscando qué cosas sí podrían funcionar. Las ideas a veces son bellas, las ejecuciones pueden ser lo que empobrece sus resultados. Quizá las ideas no es lo que no sirve, quizá son los enfoques y la forma de ejecutar. No sabemos y los dirigentes que tenemos no quieren saber: parte de su propuesta es seguir insistiendo en que sí sirven (algo contraevidente) y seguirlas repitiendo casi a ciegas.
El silencio o casi silencio de las facultades de educación en Medellín es también bastante diciente. ¿No habría una gran responsabilidad de parte de éstas? Los contratos que han celebrado las Secretarías de Educación de Antioquia y Medellín (y algunos municipios) con estas facultades suman muchos miles de millones de pesos por años, los resultados están por verse ¿no hay ahí un problema de conflicto de intereses pues estas facultades y universidades se benefician de los contratos oficiales y luego guardan un silencio triste cuando los malos resultados salen a la luz pública? ¿No sería como para salir a revisar qué fue lo que se hizo en esos contratos, que luego de ejecutados muestran resultados tan pobres? No digo devolver el dinero, pero sí revisar para no seguir repitiendo, mejorar internamente para que se gradúen más y mejores docentes de educación básica y media y proponer programas y proyectos más efectivos.
Lo mismo va para el Ministerio de Educación. En la página del Ministerio de Educación Nacional figura como Directora de Calidad de Educación Preescolar, Básica y Media la Sra. Mónica Figueroa. Su hoja de vida está aquí. Sus calificaciones no incluyen ser docente o que haya hecho investigación en el área, solo ser funcionaria eterna de una entidad u otra. Por poner un último ejemplo, hay fenómenos interesantes en la historia del país como los INEM que cuando se crearon dieron buenos resultados académicos. Solución: acabarlos y desdibujar sus definiciones y estructura única. Este tipo de fenómenos son la norma. Ahora, en estos días, llega al ICFES un Señor con doctorado en telecomunicaciones... y sale una persona con doctorado en educación.
En síntesis, actuamos sin evaluar lo hecho y no sabemos qué funciona y qué no. Los resultados de PISA son malos para Colombia, pero son más malos para Medellín que lleva años construyendo y contratando cosas sin lograr mucho. Es hora de que paremos de gastar y empecemos a invertir, pero para invertir hay que saber qué sirve y qué no. Y no sabemos, es hora de evaluar y repensar. Es hora de cambiar gente, ideas, formas, métodos, de todo. Es hora de una crisis, las cosas no pueden seguir como están en educación.
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